Esta vivienda acaba de ser reformada íntegramente y se presenta como una propiedad de alto nivel, lista para entrar a vivir, situada en una segunda planta exterior de un edificio clásico. Con una superficie construida aproximada de 169 m², destaca por su excelente distribución, su gran luminosidad y la calidad excepcional de los materiales empleados en la reforma.
La vivienda se entrega completamente amueblada y ha sido diseñada para ofrecer el máximo confort, combinando elegancia contemporánea y funcionalidad.
Desde el recibidor, que cuenta con armarios integrados y una cuidada iluminación, se accede a un magnífico salón-comedor distribuido en dos ambientes claramente diferenciados. Este espacio, amplio y muy luminoso, se abre a la calle Castelló a través de tres grandes ventanales, lo que aporta una sensación constante de amplitud y conexión con el exterior. La iluminación natural es uno de los grandes protagonistas de la vivienda, reforzada por una estudiada iluminación LED indirecta que realza los volúmenes y crea una atmósfera cálida y sofisticada.
La cocina, completamente equipada y diseñada a medida, dispone de una gran isla central que se convierte en el eje funcional del espacio. Cuenta con electrodomésticos panelados de primeras marcas, amplias zonas de almacenaje y una cuidada selección de materiales que combinan estética y durabilidad, convirtiéndola en un espacio ideal tanto para el día a día como para recibir invitados.
La zona de descanso está compuesta por tres dormitorios dobles, todos ellos con baño en suite, lo que garantiza privacidad y comodidad. El dormitorio principal destaca por su amplitud y por disponer de un espacio adicional destinado a despacho, así como de un elegante vestidor independiente. Uno de los dormitorios tiene acceso directo a una agradable terraza, un espacio exterior perfecto para disfrutar de momentos de tranquilidad. La vivienda cuenta además con un aseo de cortesía y numerosos armarios distribuidos estratégicamente, incluyendo armarios en el pasillo para ropa blanca y almacenaje adicional.
En cuanto a calidades, la vivienda dispone de aire acondicionado por conductos con sistema AIRZONE independiente por estancias, carpinterías de aluminio con rotura de puente térmico y persianas motorizadas, suelo de madera de roble natural de alta gama, red de datos y tomas de televisión en todas las estancias. Los baños están revestidos con porcelánicos de primeras marcas y equipados con sanitarios y griferías de diseño, manteniendo una estética elegante y atemporal.
La propiedad se ubica en un edificio construido en 1939, con una fachada clásica que refleja el carácter señorial del Barrio de Salamanca. El inmueble conserva el encanto de la arquitectura madrileña de la época, combinado con las comodidades actuales, y ofrece un entorno residencial tranquilo y distinguido.
Situada en la Calle de Castelló, a la altura de la Calle Diego de León, la vivienda se encuentra en pleno Barrio de Salamanca, una de las zonas más exclusivas y demandadas de Madrid. El entorno ofrece una amplia oferta de comercios, restaurantes, centros educativos, servicios y excelentes conexiones de transporte público. Vivir en esta zona supone disfrutar de un estilo de vida urbano sofisticado, con todas las comodidades y en un entorno de gran prestigio, convirtiendo esta propiedad en una oportunidad excepcional tanto como residencia habitual como inversión de alto valor.